Una tragedia sacudió a una familia en Texas cuando dos hermanas, Blair y Brooke Harber, de 13 y 11 años, murieron tras ser arrastradas por la corriente del río Guadalupe durante las fuertes inundaciones en el centro de Texas. Las niñas estaban en un viaje familiar en Casa Bonita con sus abuelos cuando llegaron las lluvias repentinas.
Sus padres, RJ y Annie Harber, intentaron llegar hasta ellas, pero la creciente corriente no les permitió avanzar.
Doce horas después, los cuerpos de ambas infantes fueron hallados a más de 20 kilómetros del sitio donde desaparecieron, tomadas de las manos, lo que conmovió a la familia.
Un mensaje de texto enviado por las niñas en la madrugada, “Los amo”, ha sido un consuelo para la familia en medio de su dolor.
Ahora, la familia continúa con la búsqueda de los abuelos, Mike y Charlene, quienes aún siguen desaparecidos.
